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Traffic

febrero 17, 20141164 views3

Dos escenarios donde luchar contra la droga: México y Estados Unidos. Tres

bandos en conflicto: el político, el policial y el del narcotráfico. Ésta es la historia que nos cuenta Traffic.

Por un lado, nos encontramos con los esfuerzos de los policías mexicanos Javier Rodríguez y Manolo Sánchez, luchando en la primera línea contra la droga. Tras detener un trasporte de drogas, Javier recibe instrucciones para arrestar a Francisco Flores, un asesino a sueldo que trabaja para los hermanos Obregón, responsables del cártel de Tijuana. Sin embargo, finalmente Javier descubre que hay miembros de la policía y del ejército que también son corruptos y que están tratando de acabar con este cártel para que el cártel de Juárez, rival de los hermanos Obregón, tome el control.

Una segunda historia narra las peripecias de Helena. Eduardo Ruiz, que trabaja para el narcotraficante Carlos Ayala, marido de Helena, es detenido. Así, a cambio de la inmunidad, Ruiz, decide delatar a Ayala. Mientras comienza el juicio, Ruiz es puesto en protección de testigos. Sin embargo, Helena, que tras la detención de su marido se entera de la verdadera profesión de éste, no duda en hacer lo que sea para salvarle a su marido.

Por último, Traffic nos narra la historia de Robert Wakefield que es nombrado jefe de la Oficina del Presidente de la Política Nacional de Control de Drogas. Sin embargo, ni siquiera él está a salvo de los problemas que causan la droga: su hija Caroline se engancha primero a la cocaína y, después, a la heroína, y Wakerfield se debate entre proseguir su batalla pública contra la droga o combatirla en su propia casa, con un miembro de su propia familia.

Traffic es una excelente película que nos demuestra las conexiones existentes entre los distintos universos de la droga: desde la vida de los traficantes de droga hasta la de los consumidores y sus familiares. Asimismo, también plantea una dimensión política, policial y social del problema donde los límites no están claros, las alianzas se construyen y reconstruyen continuamente y donde nunca sabes quién puede ser el próximo en traicionarte o en ser la víctima de esta guerra sucia. A veces las victorias en la guerra contra la droga parecen insignificantes (como cuando Javier decide declarar contra miembros corruptos de la policía a cambio de electricidad para su barrio). No hay una batalla final llena de fuegos artificiales sino pequeños logros que se ganan gracias a grandes esfuerzos. Y lo que al final podemos concluir es que esta batalla siempre está en proceso y que tiene dimensiones mundiales.

Tráiler de la película Traffic